SUMARIO
EVERY BREATH YOU TAKE OF ME.
SEGUNDA TEMPORADA.
Capitulo 28.
POV. ____________
Mire a mi madre quien estaba detrás de mi al tiempo que guardaba lo ultimo dentro del pequeño bolso que ella misma me había preparado y traído días atrás. La semana y algo que había pasado internada en este lugar habían de verdad ya afectado de sobremanera en mi y solo quería salir de allí, volver a casa con mi hombre.
-¿lista?- gire nuevamente, esta vez en dirección a la puerta, encontrándome a robert cruzando el umbral de esta. le sonreí totalmente alegre y feliz de verle. él me sonrió de vuelta acercándose a mi enseguida, su paso directo hacia mí. estire mis manos a su torso tocando allí con posesión mientras el dedicada un pequeño beso a mi frente.
-lista- dije, él tomo el bolso de sobre la cama cuando ya en la habitación no éramos solo nosotros tres, el Dr. Morrison había entrado. Nos mantuvimos un momento allí con él, nos dio las indicaciones correspondientes para cuando lleguemos a casa. Robert le escucho con tal cuidado y atención, como si hubiera memorizado de verdad cada una de sus palabras.
Al terminar los tramites correspondientes en el hospital, junto con mi madre, fuimos hasta nuestra casa. Al llegar de verdad me sentí totalmente cómoda y aliviada, como extrañaba nuestro lugar, nuestro hogar. Mi madre estuvo un buen rato conmigo aconsejándome de todo un poco, yo asentía y respondía a todo lo que ella me decía, sabía que lo hacía porque realmente le preocupaba y quería que nada malo volviera a suceder. Mi madre nos dejo a las dos horas de haber llegado a casa.
Subí escalera arriba en busca de mi hombre. Le encontré enseguida en nuestro cuarto.
-no es necesario que hagas eso, puedo hacerlo yo- dije entrando al cuerpo. él estaba sacando las cosas del pequeño bolso y guardándolas cada una donde correspondía.
-pues, no me molesta hacerlo- su mirada viajo rápida de mi rostro hasta otro lado. le mire terminar realmente rápido. su cuerpo camino hacia el mío con algo de lentitud. poso su mano con ternura sobre mi rostro. mi cuerpo realmente reaccionaba ahora mismo con cualquier pequeño toque. le necesitaba.
-¿cómo te sientes? ¿necesitas algo?- susurro hacia mí, levante la cabeza para observarle. negué para luego llevar mi mano a su nuca, le presione allí empujando su rostro hacia mí, mis labios atraparon los suyos y con rapidez mordí su labio inferior produciendo que de ellos escapara un pequeño gemido, pegue mi cuerpo totalmente contra el suyo, rozando uno contra el otro.
-__________- susurro entre ese beso, mis manos acariciaron su cuerpo. pasaron rápidamente por debajo de su camisa sintiendo su tibio cuerpo, el calor de el debajo de mis manos y eso me basto para darme cuenta que realmente le necesitaba inmediatamente, las ganas y ansias estaban peleando dentro de mí con fuerza.
-__________- él de repente tomo mis manos sacándolas con lentitud de sobre su cuerpo y se separo de mi tan lento como antes había hecho con mis manos. demore unos minutos apropósito y abrí la mirada, ojos verdes oscuros me observaban con prepotencia y su rostro, su rostro estaba totalmente tenso, completamente. -vamos abajo...-su voz salió tan baja y contenía. -tienes que comer algo- y sin más tomo mi mano dando la vuelta caminando fuera del cuarto.
¿Que había sido eso? conocía perfectamente a Robert, sus acciones, sus actitudes y sabia como su cuerpo respondía o sentía completamente a mi o mis toques, besos hacia él. Y había notado la misma energía en su cuerpo que en el mío. pero se había detenido y tenía la claridad de porque eso había sido.
Al llegar a primer piso, comenzó una conversación enseguida. él sabría que le preguntaría en cualquier momento sobre su reacción anterior y estaba más que claro que no quería decirme nada sobre eso. Trate de no pensar en eso pero era algo inevitable de verdad, me había dejado como sin saber que hacer o decirle realmente. ¿Y qué le iba a decir? creo que yo estaría igual que él si estuviera en su lugar, él quería cuidarnos y cuidarlo a él sobre todo. Pero yo tenía algo realmente claro, no dejaría que nada entre nosotros detuviera mi deseo por él. Sentirme amaba por él era totalmente algo único, no había cosa más increíble para mí que sentir su cuerpo contra él mío, sus manos acariciando cada parte de mi, sus labios donde él quisiera rozarlos. No había sensación mas increíble que sentirme suya.
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