Tuesday, November 05, 2013

FanFic: "EVERY BREATH YOU TAKE OF ME - SEGUNDA TEMPORADA" (Robert Pattinson & Tú) - 55vo Capitulo.

Hola preciosas :D paso rapidito a dejarles nuevo capitulo, espero que lo estén disfrutando, a mi en verdad me esta encantado jajaja espero sigan apoyando como siempre bellas!! un enorme beso <3.

ANI(:

CAPÍTULOS ANTERIORES REVISARLOS AQUÍ :)

EVERY BREATH YOU TAKE OF ME.
SEGUNDA TEMPORADA.
Capitulo 54.


Cuatro días estuvimos en la clínica entre chequeos y todo el papeleo general. Por la causa del adelanto del parto y mas por la caída me tuvieron mas días de los que había esperado para descartar cualquier daño y bueno, no solo en mi si no también en mi pequeño. Robert literalmente en esos cuatros días se había mudado a la clínica, no se despego un minuto de mi o de nuestro hijo. Antes de quedar dormida en cualquier momento le veía y también le veía al despertar en el mismo lugar donde le había visto antes de dormir, literalmente pensaba en que él no se movía de su lugar. Llevaban a Leonard unas tres o cuatro veces en esos días en que estuvimos allí y realmente era porque yo se los pedía, no quería apartarme de él. Me sentía totalmente tranquila y encantada tan solo de mirarle y aun mas cuando le sentía entre mis brazos, era un pedacito tan pequeño, un pedacito hermoso y perfectamente. Antes no creía cuando decían que realmente las madres al ver a sus hijos por primera vez caen en un estado de enamoramiento con ellos, o más bien de admiración total donde no hay nada, ni nadie más que ellos para uno. Y yo me sentía así totalmente encantada por mi pequeño. 

Lo más "duro" de los primeros días fue el darle pecho, porque oh mierda como dolió la primera vez. y lo peor fue que la leche no me bajo enseguida se demoro unos cuantos intentos que realmente fueron muy jodidos. nunca antes me había dolido así, quiero decir, jamás. Al segundo día de internación en la clínica pude ya estar de pie, no mucho tiempo, pero si para poder yo misma vestir y cambiarle los pañales a mi pequeño. realmente me puse nerviosa la primera vez y lo estaba mucho. mi madre estuvo en todo momento conmigo indicándome, junto con Clare que debía hacer. y no era para nada difícil solo los nervios me habían fallado un poco. Robert...él solo miro el primer día pero pronto le obligaron prácticamente a que él lo hiciera y me sorprendió bastante, cambiaba pañales con más calma y paciencia que yo. En las noches él se encargaba de eso, aun yo me sentía algo atareada y tonta por todo lo que había pasado y en las noches nos dejaban a nuestro pequeño y me encantaba, solo que tenía un pequeño problema con el sueño, literalmente caía a dormir como tronco y Robert no era capaz de despertar, o bueno, eso era lo que él decía. solo me despertaba cuando ya nuestro pequeño necesitaba su ración de leche nocturna como le había escuchado decir a mi hombre en los primeros días. Luego de eso, la estancia en la clínica fue rápida por lo que estaba feliz, deseaba ya llegar a casa junto al nuevo integrante de la familia. 

Y si, los primeros días las cosas anduvieron bien, pero no duro mucho para mí. Y no era por la culpa de nadie, solo fue algo en mi que se había descontrolado luego de este maravillosa pero gran cambio en mi vida. 

-_____________, cariño, ábreme, si?- él volvió a mover la manecilla de la puerta con fuerza y sabia lo desesperado que estaba pero sentía que yo lo estaba aun mas y si no me daba a mi mismo diez o quince minutos para estar sola y llorar dentro de ese baño las cosas empeorarían. y ahora mismo lloraba por rabia hacia mi misma por sentirme de esta forma. Y es que en ningún momento es por culpa de mi pequeño, es solo que me siento completamente cansada y sin fuerzas, hace más de dos semanas que no dormía bien y me agotaba, me agotaba él estar cada segundo dentro de esa casa sin nada más que hacer, sentía una necesidad inmensa por volver a trabajar y sentirme útil de esa forma. Pero amaba estar con mi pequeño, realmente me encantaba solo sentía que era demasiado. o ¿realmente esto es para mí? y ¿si no lo es? ¿y si no puedo ser una buena madre?. mi llanto volvió a salir aun mas fuerte con ese sentimiento de frustración recorriendo mi cuerpo a los segundos. el piso del baño realmente estaba helado pero luego de unos segundos no le sentía. abrace mis piernas escondiendo mi rostro entre ellas y volviendo a soltar mi llanto, solo necesitaba sacar fuera todo lo que a dentro en ese minuto estaba colapsando mi mente y corazón. de repente escuche el ligero sonido de la puerta al abrirse y luego al cerrarse pero solo me mantuve en la misma posición aun sollozando. y de repente me sentía totalmente ridícula. 

-cariño, ven aquí...- sus tibios brazos tomaron los míos desasiendo totalmente la posición en que me encontraba, él se sentó aun lado de mi para luego sin algún sobre esfuerzo alguno me pusiera sobre su cuerpo como si fuera un pequeña de cinco años que se acaba de caer y la acurrucan entre sus brazos con total amor y protección. sus manos se deslizaron por mi cuerpo para totalmente abrazarme, escondí mi rostro entre su pecho mientras aferraba mis manos firme contra su torso. 

-lo siento...-dije entre sollozos-...esto...soy detestable-seguí, él me callo con un susurro. -siento que no puedo mas, Robert. siento que no podre hacerlo...-volví a soltar como pude, mi sistema en general estaba realmente alterado o solo yo le sentía de esa forma en ese momento. sus manos comenzaron a acariciar dulcemente partes de mi cuerpo en puro acto para que pudiera calmarme un poco, él sabía cómo hacerlo. -nada has hecho mal, ____________. ¿por qué lo piensas?- me pregunto, no moví mi rostro desde el lugar que lo tenía, no era capaz de mirarle ahora mismo. -estoy cansada y no quiero sentirme de esa forma, no está bien...- dije nuevamente, él esta vez se aparto de mi haciendo que levantara mi rostro inconscientemente de lugar mis ojos cayeron en los suyos, bellos ojos verdes algo cansados y perturbados me observaban con claridad. -¿y por eso crees que lo has hecho mal? oh, cariño!! no has hecho nada absolutamente mal.- volví a agachar la mirada, él no me entendería. -estoy siendo cobarde ahora mismo, no lo entiendes, él no tiene la culpa de nada...solo yo, solo yo- de repente nuevamente iba a romper en llanto pero pude controlar ese fuerte impulso. -no lo eres, ____________. hace dos semanas vi lo valiente que eres y no puedes ni siquiera imaginar lo orgulloso que eso me tiene.- hizo una pequeña pausa, su mano levanto mi mentón para que le mirada directamente a eso alucinantes ojos verdes. -¿sabíamos que iba a hacer difícil, verdad? ¿y que fue lo que dijimos? que nos apoyaríamos en todo momento, no quiero que te sientas de esa forma por que no viene al caso, _____________. recuerda que nadie nace sabiendo cómo ser padre, como cambiar un pañal o dar biberón o darle el primer baño al pequeño- eso ultimo lo dijo con una pequeña y encantadora sonrisa, haciéndome recordar el primer baño realmente divertido de nuestro hijo. semi sonreí para él. -eres y seguirás siendo la mejor madre, nadie mira, acurruca, toca...admira a nuestro pequeño como tú lo haces, nadie le entrega ese amor que yo he visto que tu le entregas. y tienes que confiar en eso, amor. y si no es así...aquí estaré yo recordándotelo a cada segundo si es necesario- cerré la mirada y volví a aferrarme contra él, mis manos firme contra su torso. aspire ese olor único suyo unos largos segundos y poco a poco sentía que volvía a la calma, que la inseguridad y miedo se alejaban de a poco. y no sé cuánto tiempo abríamos pasado allí, él sentado en el frio suelo del baño conmigo entre sus brazos acurrucurandome con total amor. Y en ese momento volví a comprender que realmente sin él no podía estar, no podía tener un vida sin él. Robert era ese cable a tierra que yo necesitaba, ese que en momentos como estos me jalaba con fuerza a su costado para que siguiera firme junto a él. por que allí era donde yo pertenecía, no había lugar mas mágico y esencial para mí que ese. 

Lentamente volví a levantar mi rostro desde su torso mientras mi mano subía por él con lentitud hasta su cuello y luego hasta que mis dedos tocaran como con total delicadeza sus finos y tibios labios. me puse totalmente rígida frente a él observándole y aun entre sus brazos. y un minuto todo fue nada en ese momento, allí, en medio de ese frio lugar, para mí solo éramos los dos. 

me acomodo rápidamente sobre él y su cuerpo estaba igual de rígido que el mío, sus manos presionaban contra mi espalda y amaba sentir ese sentido de posesión de él sobre mí. era único. sus labios rozaron los míos haciendo que en un puro acto cerrara la mirada como si hubiera sido el mayor acto de placer. y es que le necesitaba, le necesitaba inmensamente. moví mis caderas sobre él sutilmente, despacio haciendo que esos pequeños movimientos reaccionaran en él de inmediato. sus labios bajaron hasta mi cuello y beso son dulzura, con total ternura, despacio y suave al tiempo que sus manos acariciaban con determinación mis senos los cuales él se había encargado de dejar libres en un par de segundos. su boca siguió bajando y bajando hasta alcanzar uno de mis senos. realmente él los amaba ahora mucho mas, habían crecido bastante durante el embarazo y eso lo tenía fascinado. lamio y mordió con cuidado sobre mi pezón haciendo que se produjeran esas extrañables corrientes, pequeñas corrientes por todo el cuerpo. de repente sin mas él succiono y senti como corría el liquido. le observe y él hizo lo mismo hacia mí a los segundos, le semi sonreí esperando lo que fuera, cuando escuchamos el llanto de nuestro pequeño. 

gire mi rostro, viendo la puerta del baño cerrada. algo preocupada me levante enseguida, de seguro ya pediría mas alimento, siempre era así cada vez que despertaba. tome mi remera blanca desde el suelo y me la puse enseguida, volví a observarle desde arriba, él seguía en el suelo. 

-¿qué?- le pregunte extrañada. 

-¿de verdad se alimenta con eso? no te sientas mal pero es de verdad....-hizo una pequeña pausa y con la mueca de su rostro me quedo totalmente claro que quería decir. -¿tan mal sabe?- él asintió a mi pregunta -bueno, tu hijo es feliz con esto- dije tocando mis dos pechos con las manos, él alzo una ceja regalándome al tiempo una hermosa semi-sonrisa, esa que me enloquecía. me di la vuelta para ir ya con mi pequeño -son mías!!- grito antes desde el baño antes de que tomara a Leonard en brazos y él se tranquilizara al ponerlo entre mis brazos, reí por lo que mi hombre había gritado. Y de repente comencé a pensar en que realmente necesitábamos un tiempo juntos aun que sea un par de horas pero realmente solos. sabia, podía percibir que él me necesitaba con la misma fuerza que yo a él.

1 comment:

  1. excelente como siempre pero muy corto heeeeeee tengo que esperar mucho para el proximo x favor nooooooooo jajaja

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