Como prometi chicas les dejo nuevo capitulo de la fanfic(: espero que lo disfruten mucho & lo sigan disfrutando mas en el futuro jiji nos vemos pronto, gracias y las adoro<3
Ani(:
SUMARIO
***
EVERY BREATH YOU TAKE OF ME
CAPITULO 12.
Mi madre salió deprisa de la casa a mi dirección
-Cariño!- se acerco a mi abriendo sus brazos y acunándome en ellos, le sonreí y la abrace fuerte, como necesitaba esto, algún mimo de ella.
-mama- suspire en su hombro –te extraño- dije de inmediato, se alejo y tomo mi rostro entre sus manos, me sonrió tiernamente
-y yo a ti, amor mío- frunció el ceño –te ves realmente pálida y…-se alejo para verme de arriba a bajo- y tan delegada, cariño. ¿Te sientes bien?- asentí
-estoy bien, solo un poco cansada- respondí. Sonrió como diciendo ‘claro, te creo hija’, rodee los ojos al tiempo que se tiraba sobre Robert a saludarlo tan amorosamente, lo amaba en verdad. Mire la escena desde su espalda
-hijo- lo abrazo y Robert sonriente le correspondió
-Angelina- la nombro suavemente
-tu luces increíble, hijo. Gracias por el llamado de hoy, me has tranquilizado- soltó, y yo le fulmine con la mirada, lo había olvidado. Mi madre se dio la vuelta hacia mí
-Bueno, vamos dentro de casa-
Entramos y el gran vestíbulo de la entrada hermosamente decorado y ordenado nos recibió. Caminamos hasta el livig comedor juntos. Respire hondo llenándome de ese increíble y exquisito aroma de la casa, a veces lo recordaba tan vagamente
-dejare el bolso aquí- escuche la voz de Robert, le mire y asentí.
-mama, me quedare unos días con ustedes si no les importa- dije mirándola, se sorprendió sin duda alguna.
-Claro...claro, cariño. Sabes que no hay problema- miro a Robert enseguida, quien estaba mirándome a mi. Mi madre carraspeo su garganta
-Iré un minuto a la cocina-
Robert se me acerco lo bastante para estar realmente muy cerca de mi. Levante la mirada y ojos verdes bellamente en paz me miraban.
-Cualquier cosa que desees, si algo necesitas, pero lo mas mínimo ___________, llámame, si?- asentí lentamente. –no apagues el celular, que al tiempo que lo hagas estaré al minuto plantado aquí ___________- sonreí por lo bajo y asentí nuevamente. Tomo mi cintura con una de sus manos y me acerco a el.
-Te amo, __________-susurro sobre mi frente. Suspire y moje mis labios. Dio un beso largo sobre mi frente, cerré los ojos y disfrute los segundos largos que duro. Se alejo de mí
-Despídeme de tu madre-
-Lo haré susurre, nos miramos. Sus ojos verdes me miraban con tristeza, con algo de rabia también. Nos observamos uno al otro bastante tiempo y ahora no quería quedarme aquí, no quería que el se fuera. Abrí mis labios, pero no fui capaz de decir nada. El dio la media vuelta saliendo del comedor, a los segundos escuche el golpe de la puerta de entrada.
Me senté en el largo sillón del living comedor echando mi cabeza hacia atrás.
-tendrás mucho que contarme- escuche la voz de mi madre y levante la mirada, la mire con algo de pánico. No quería que supiera nada de esto. Se sentó a un lado de mi y me atrajo con sus brazos, haciendo que apoyara mi cabeza sobre sus piernas al tiempo que ella comenzaba a hacer cariño en mi cabello
-No es nada importante o grave, de verdad-dije cerrando los ojos
-¿Tienes problemas con Robert?- mierda.
-No, no, las cosas van…bien- dije en un suspiro, se movió y me levante nuevamente, me observo
-Esta bien si no quieres contarme, entiendo que son problemas que quieres resolver entre ustedes por que así corresponde, pero yo estoy aquí y soy tu madre, y te ayudare y apoyare en todo lo que quieras, ___________-
-Lo se y gracias por eso- pausa- He tenido bastante trabajo y solo quería alejarme un poco de todo eso, por unos días. Quería verlos, pasar tiempo con ustedes- solté, me sonrió tiernamente.
-Y me encanta eso. Nos has tenido tan olvidados, _________- su tono de voz en reclamo me hizo reír un poco, volví a tenderme y posar mi cabeza sobre sus piernas
-Lo se y lo siento. Tratare de que no pase más-
-Espero, cariño- dijo en respuesta. Su cariño en mi cabello estaba haciendo efecto en mí, me relaje totalmente, mis parpados comenzaron a pesar y mis ojos se cerraron llevándome al país de los sueños
Abrí los ojos de golpe. Que jodido sueño, Dios. Mi pecho subía y bajaba, toque mi rostro y estaba sudado. Había sido una pesadilla realmente espantosa. Mire al techo del lugar, la lámpara gigante del living-comedor estaba encendida y mis ojos no estaban para nada contentos con eso. Enderece mi cuerpo en el sofá, no había nadie alrededor. Tome mi bolso en mis manos y subí escalera arriba, a mi cuarto, bueno el que solía ser mi cuarto. Al entrar tire el bolso al suelo y de inmediato entre al baño, me acerque al lavamanos y eche a correr la llave, moje mi rostro unos segundos con agua bastante fría. Eso ayudo bastante a que la temperatura de mi cuerpo bajara por causa de esa pesadilla. En ella se había retratado mi miedo más profundo, el más horrible de todos para mí…perder a Robert en toda forma posible. Mi cuerpo se estremeció frente al espejo por ese simple pensamiento.
-hija- tome una toalla y seque mi rostro. Salí del cuarto encontrándome con mi padre en la entrada de este. Sonreí alegre
-papa- me tire sobre sus brazos y le di un apretón fuerte, como me hacia falta este hombre a veces.
-oh- rio por lo bajo –también te he echado tanto de menor, pequeña- sus grandes manos y largos brazos me acurrucaron sobre su pecho con fuerza y cariño.
-aun no me creo que estés aquí, pensé que tu mama estaba bromeando cuando lo dijo- reí por lo bajo al tiempo que me separa y le miraba. Me observo con determinación, me lanzo una mirada de ¿Qué sucede? Negué lentamente. Entrecerró los ojos y suspiro
-esta bien, como sea. En algún momento querrás hablar y ahí estaré.- sonreí y asentí
-_____________- nos dimos vuelta, hacia la puerta, estaba parado mi hermano, Alex.
-¿estas bien?- dijo enseguida que vio mi rostro, le mire sorprendida
-estoy perfectamente- solté, el suspiro algo aliviado
-¿Por qué debería estar mal tu hermana, hijo?- mi padre pregunto enseguida, fulmine a Alex con la mirada.
-por nada, solo…es extraño que estés aquí, mama me dijo-
-y es raro que tu estés aquí también- dije cambiando radicalmente al sujeto en cuestión. Sonreí y me acerque a el dándole un abrazo, el me recibió afectuosa mente.
-vengo a casa mas de lo tu lo haces, ___________- soltó sobre mi hombro
-claro, veo- dije separándome de el, deje mi brazo sujeto alrededor de su cintura y el su brazo sobre mis hombros, ambos miramos a mi padre.
-no se culpen de nada, los dos nos han dejado bastante botados a su madre y a mi- nos regaño.
-La cena esta servida!- escuchamos el grito de mi madre desde el primer piso. Con Alex dimos la media vuelta en la misma postura que estábamos mientras nuestro padre iba un segundo al cuarto a no se que.
-¿se molesto mucho Robert anoche?- pregunto mi hermano mientras bajábamos las escaleras. Le mire y aclare los pensamientos…la otra noche. Me sonroje, mis mejillas ardieron un segundo por todo lo sucedido esa noche. ¿Enojarse? Si, y el castigo que recibí fue increíble.
-am, no, no tanto- sonreí, el hizo lo mismo.
-¿Las cosas van mejor, entonces?- pregunto al tiempo que entrabamos al comedor y nos encontrábamos con una hermosa mesa servida. Mire al frente
-si, mejorando- solté, el me miro analizando mi rostro, sonrió y nos separamos para cada unos tomar su lugar en la mesa.
Con los platos servidos y ya todos en la mesa la cena comenzó. Papa y Alex entraron en una conversación laboral. Yo solo comía y escuchaba
-…por que, oh, mierda, como es de cansador eso- soltó papa
-Eduardo- mama lo regaño y solté una carcajada. La mirada de mi madre me fulmino enseguida
-Lo siento, cariño. Es solo que…irte con una empresa, pensar en un proyecto con eso es de verdad algo difícil- asentí –no es así, cariño?- pregunto mi padre, asentí nuevamente.
-si, Dios, es la santa mierda del cansancio- escupí.
-¿Qué nadie en esta mesa puede un minuto no soltar una palabrota?- escuchamos a mi madre enseguida. Los tres reímos, su rostro era un chiste.
-aun tengo que ver en verdad que haré, eso es solo un ‘puede ser’- siguió Alex.
-Piénsalo bien, hijo. Tiene que ser algo que deje dinero pero que a la vez lo disfrutes- le dijo mi padre al tiempo que tomaba un sorbo de su copa. Le emite
-tenemos un plan con su padre- soltó mi madre a la mitad del postre. Con Alex nos miramos sutilmente con pánico. Sus ‘planes’ a veces no eran de todo lo lógico. Carraspee mi garganta.
-¿Qué es?- pregunto Alex. Mire a mi madre
-Tenemos que ir de vacaciones todos, en familia- suspire aliviada- Sera maravilloso. Hace mucho que no hacemos eso. Y con su padre hemos pensado que podemos pasar unas semanas en la cabaña de las Bahamas, es bastante espaciosa-
-¿Bastante?- solté, Alex soltó una risita.
-¿Quién fue el imbécil que dijo que era una cabaña? Parece palacio real- metí un pedazo de postre dentro de mi boca al tiempo que asentía al comentario de mi hermano.
-Bueno, como sea cariño. La idea es que esperemos que llegue su hermano Ethan desde Francia con Rose, y luego irnos, claro obviamente con Robert y Danielle- sonreí y asentí. Quizá era un buena idea, ambos, Robert y yo necesitábamos algo de tiempo libre y esto seria como perfecto. Hace mucho que el no pide vacaciones, las merece sin duda.
-Me parece una idea magnifica- soltó Alex
-Pienso igual y seria realmente genial ir todos juntos- dije enseguida
-Y yo espero que para ese tiempo tengamos algún integrante en camino- mire a mi padre quien tenia la mirada clavada en mi. Trague saliva. Sabia exactamente a lo que se refería…un bebe, un nieto, un hijo. Sonreí algo incomoda.
-No te metas, Eduardo. Eso sucederá cuando tenga que suceder- hablo mi madre tras mi silencio. La mire y le semi sonreí en agradecimiento. Mi padre asintió y luego sonrió amablemente. Dejo la servilleta sobre la mesa y se levanto del puesto
-Estaba realmente exquisito esto- dijo –ahora si me disculpan iré a la cama, fue un día jodido hoy- mire a mi madre quien rodó los ojos, Alex y yo echamos una risa.
-Te acompañare querido- dijo mi madre al tiempo que se levantaba y se ponía a su lado –Si quieren algo mas asalten la cocina que hay de todo- nos sonrió mi madre.
-Gracias mama- dije. Ella y papa se nos acercaron a cada uno para despedirse antes de ir a la cama.
-¿Película?- pregunto Alex cuando ya estábamos solo los dos en el comedor
-Claro- dije animada. Antes solíamos hacer eso siempre, éramos amantes realmente de las películas, cualquiera que fuera ya la hemos visto unas cuantas veces. Creo que era nuestro pasatiempo juntos preferido, disfrutábamos ambos mucho ese tiempo juntos. Tomamos algunas cervezas de la cocina y algo de comida para acompañarlas. Subimos al cuarto de vídeo puso una de esas películas de acción que a el tanto le gustaban, con cerveza en mano nos sentamos y comenzamos a verla.
A los diez minutos de la película comencé a pensar en el gran viaje de vacaciones que tendríamos, por que si mama lo dijo, lo tendríamos si o si. Esperaba en verdad que no afectara mucho con la empresa, estar unos días fueras ya era complicado, como seria unas semanas. Creo que nunca antes nos hemos apartado tanto de la empresa, siempre han sido pequeños trazos de tiempo, máximo 5 días si no mal recuerdo. Ahora tendría que ser algo diferente, teníamos empleados y socios de confianza que podían manejar todo el rollo de la empresa por unas semanas. El problema que podría haber era exclusivamente mi marido. Era algo obsesivo por el trabajo, todos nuestros conocidos o amigos lo llamaban así. Pero yo lo veo mas de un lado de gustos, el ama lo que hace, lo entiendo porque me sucede lo mismo. Pero lo convencería a como fuera lugar, quería ir, y si el no iba que caso tenia que fuera. Además no aguantaría unas semanas sin verlo, claro que no. Nos vendría bien nuevos aires, lejos de todo esto, lejos de los problemas. Quizás nos podamos encontrar alguna solución o calmar todo este mal asunto entre nosotros, que las cosas vuelvan hacer como antes, como el dijo, que volvamos hacer nosotros.
-Dime- la voz de Alex me distrajo, le mire y el estaba mirándome detenidamente
-¿Qué pasa?- dije
-Dime tu, __________- soltó – te he estado hablando los últimos cinco minutos y tu nada-
-oh, lo siento, de verdad lo siento- susurre mirándole. Su rostro se ablando y se acerco más a mí
-¿De verdad no me dirás que va mal?- me miro completamente impaciente pero su expresión estaba totalmente calmada.
-No sucede nada…grave- dije
-Pero algo pasa. Has venido a quedarte acá por unos días, __________. ¿Han peleado? ¿Te ha hecho algo? Habla, _____________- Negué con la cabeza, era un poco fastidiosa toda esta situación.
-Es solo que no es de tu incumbencia Alex- le empate fríamente. Me observo un segundo más y luego cambio de postura y continúo mirando la película. Suspire y le mire, no debía haberle dicho eso y mucho menos en esa forma. Esta preocupado, y lo entiendo, yo estaría igual.
Tomo un sorbo de cerveza al tiempo que se levantaba.
-Alex, lo…-
-Déjalo ya, __________- me dijo de espaldas –Iré a la cama, tú deberías también- y cruzo el lumbral de la puerta. Oh, genial. Mi hermano estaba enojado.
¿Por qué querían saber lo que sucedía? Era algo que solo nos pertenece a Robert y a mí. Ellos no necesitan preocuparse ni saber nada esto. Creo que lo podemos solucionar los dos. Unos minutos después me levante del cómodo sofá, apague el televisor y camine a mi cuarto. Me prepare enseguida para dormir cuando llegue. Había sido un día algo loco en verdad. Me recosté en la cama, estire mi brazo aun lado, tome de la mesita de noche mi celular, tenia dos llamadas perdidas y un mensaje, era de Robert. Leí
“Espero que todo valla bien, __________. Contesta el celular.’
No quería llamarlo por lo que solo respondí el mensaje.
“Todo va muy bien. No te preocupes. Ahora iré a la cama, llama mañana si lo quieres. Buenas noches”
Su respuesta fue casi inmediata.
“Me alegra que te comunicaras, ___________. Estoy preocupado, claro que lo estoy. No estas a mi lado, eso es horriblemente extraño. Mañana te llamare a primera hora. Buenas noches, amor”
Amor. ¿Realmente lo había escrito? Dios. ¿Hace cuanto que no lo decía? Y en ese momento desee tanto escucharlo de sus labios. Y lo extraño. Deje el aparato sobre la mesita y nuevamente me recosté en la cama. Mi mente vago en la noche anterior, en sus besos, en sus ágiles manos sobre mi cuerpo, en su toque…sus labios en mi. Dios, ¿Y así en algún momento pensé en dejarlo? Me calienta con solo recordar cada toque, beso proveniente de el. No, esto no acabara. Solo tenemos que volver a encontrarnos el uno al otro, y confiarnos, como antes. Y eso no seria difícil, pudimos hacerlo una vez, y claro que podremos hacerlo nuevamente. El me ama, y yo estoy mas que perdidamente y locamente enamorada de el.
No comments:
Post a Comment